25 Julio 2011, 10:28 PM

Desperdicio irresponsable

Si el agua ha sido uno de los elementos más abundante de la naturaleza, deberíamos ir considerando que esa condición no es eterna y que, aunque no lo parezca, el agua se va acabando.

Varias causas están determinando que haya cada vez menos agua, y entre ellas están el calentamiento global y el dispendio irresponsable de este líquido sin el cual no es posible la vida. El hecho real es que cada vez es menos la disponibilidad de agua potable.

Un ejemplo de uso irresponsable del agua lo da la ciudad de Santo Domingo. El director general de la CAASD, ingeniero Freddy Pérez, afirma que en Santo Domingo el desperdicio de agua es más alto que en la mayoría de las ciudades de América Latina.

Por otra parte, la evasión del pago de este servicio está también en niveles escandalosos, a pesar de lo mucho que cuesta potabilizar, almacenar y distribuir este líquido. La gente paga con más rigor un efecto tomado a crédito que el agua que necesita para vivir.

Ante esta situación y al hecho real de que cada vez disponemos de menos agua, es necesario reglamentar el uso de este elemento natural y crear conciencia ciudadana sobre la necesidad de lograr que su uso sea  responsable y racional.

Hay que hacer del consumo responsable del agua una filosofía de vida.

Ahorrar y ser más  eficientes

Los precios internacionales del petróleo y las alzas de sus derivados son una tara para la economía del país. El ministro de Industria y Comercio, Manuel García Arévalo, tiene mucha razón cuando plantea la necesidad de aplicar un plan de ahorro de combustibles que permita hacer más ligera la cada vez más alta factura petrolera.

El país no puede continuar elevando ilimitadamente sus consumos de estos renglones.

 El país necesita implementar políticas que le permitan ahorrar  en cantidad de consumo a la vez que se procura mayor eficiencia.

Necesita, por ejemplo, que el transporte de pasajeros se realice preferentemente en unidades de gran capacidad y acelerar la conversión a gas natural de todo lo que sea posible. Ahorro de combustibles y eficiencia en el uso de los mismos debe ser la consigna.